domingo, 22 de junio de 2008

Hasta luego Auckland

Han sido 4 meses y 19 días viviendo en esta ciudad. Lo suficiente para conocerla bastante bien. El caso es que es un "hasta luego", porque el 7 de Julio volvemos para allá. Pero solo estaremos un par de días, ya que el 9 de Julio cogemos el avión para retornar a España. Por eso ha sido una despedida extraña. A la gente que no te importaba demasiado sabías que no la ibas a volver a ver durante esos escasos dos días. Pero como no te importaban mucho, pues como que la despedida te daba un poco igual. Y a los que te importaban, sabias que en ese corto tiempo les darías la despedida final. Pues eso, que fue despedida descafeinada. Seguramente lo mas nostálgico de nuestra despedida fue despedirse del apartamento y de Pan. Porque empiezas a recordar todo lo que has pasado en el apartamento. Y de Pan, porque aunque sabíamos que nos volveriamos a ver ese par de días, también sabiamos que no volvería a ser lo mismo. Nunca más nos volveríamos a ver todas las mañanas al levantarnos. Ni haríamos la comida mientras ella repite que tiene "mucha mucha hambre" (si, en español). El caso es que no volveriamos a compartir nuevamente tantos y tantos momentos. Se me cae la lagrimilla.

Antes del día de nuestra partida (que fue el Jueves pasado, os escribo desde la Isla Sur) hicimos la anunciada fiesta de despedida. La verdad es que me quedo mala sensación. La gente había acudido en masa y además con más generosidad que nunca (no había sitio en la nevera para meter tanta cerveza) Pero a eso de las 11:30 de la noche llamo a la puerta la seguridad del edificio. Nos instaron a que terminaramos el fiestorro. Ya es mala suerte, la primera vez que vienen y tiene que ser en la fiesta de despedida. Juro que estabamos haciendo menos ruido que otras veces y ademas era relativamente pronto. Pero bueno, tras decir a la gente que desalojara, nos dirigimos a otro lugar con todas las cervezas. A partir de ahí, la gente se separó. No conseguimos encontrar un bar a gusto de todos (entramos hasta a un bar gay) y cada vez el grupo fue menor. Asi que no me lo pase bien del todo. Al contrario de la fiesta de despedida a Alberto, que fue cojonuda. Bueno, y recordando mi fiesta de despedida en Madrid y mi último Sábado, y ni punto de comparación. Pero bueno, me guste o no, ese fue mi último Sábado en Auckland. Agridulce y posiblemente el ultimo que pase alli en toda mi vida.

sábado, 14 de junio de 2008

Cosas que hacer en Auckland cuando estás vivo (II)

Ir a una cata de vinos españoles

Conocimos a dos madrileñas por la calle y nos informaron que esa misma tarde había una cata de vinos españoles en una tienda de vinos. Asi que para allá que fuimos siguiendo el cartel de “Spanish fiesta” Tomamos “Marques de Cáceres” y un poco de queso manchego (que venden en ese mismo sitio a un precio desorbitado).

Ver la Formula 1

La verdad es que desde tiempos de Damon Hill no seguía la Formula 1 con tanto interés. La echan en el “Perfect Pub”, que nos queda a 2 minutos de casa. Y estás ahí sentado en un sillón tomándote cerveza barata mientras comentas la carrera. Y cuando la carrera está aburrida (el 90% del tiempo en la F1) pues hablas de otras cosas. Buena excusa para gastar hora y media en un bar.

Ir al acuario

El síndrome del residente nos había atrapado. Cuando vives en una ciudad hay una extraña fuerza que te impide visitar las cosas que visita un japonés que va a pasar tres días a tu ciudad. Asi que decidimos que teníamos que completar las actividades típicas de “turista en Auckland” Y una de ellas es visitar el acuario de Kelly Tarlton’s. Que a pesar de tener nombre de chica, era una especie de Jacques Cousteau neozelandés. Asi que haya que fuimos. Y aparte de ver pingüinos, tiburones y otra serie de bichejos marinos, había una sección dedicada a las expediciones antarticas. Me hizo revivir esa gran campaña de la expedición “Starkweather-Moore”

Visitar el Auckland Museum

El Auckland Museum se encuentra en el Auckland Domain (una especie de Retiro) y es prácticamente el único museo interesante de la ciudad. He estado un par de veces y no está mal. Como aquí no tienen cuadros ni esculturas, hacen los museos con una especie de batiburrillo. Primera planta, cosas maorís. Ahí, entre otras cosas, puedes entrar, tras quitarte los zapatos, en una especie de casa sagrada de los maorís. Segunda planta, Museo de Ciencias Naturales. Lo más interesante es que tienen una casa donde te sientas como estuvieras en el salón de tu casa y hay una simulación de si el volcán Rangitoto (del que hablo a continuación) comenzara a erupcionar. Primero la tele empieza a dar noticias simuladas y luego la casa se empieza a mover (se supone que ahí, la palmas) En la tercera planta tienen “cosas de guerras” Lo más interesante, quizá, es que tienen dos aviones de la segunda guerra mundial. Uno de ellos es uno de los aviones japoneses con el que bombardearon Pearl Harbour. Por cierto, la entrada es gratuita, aunque te piden un donativo establecido (no es mucho)

Rangitoto

Otra de las actividades de domingo que nos quedaban por hacer era visitar Rangitoto. Para ir para allá, cogimos un ferry acompañados de Felipe (chileno) y Rosario (argentina) Como veis, nuestras amistades han derivado al habla hispana. Aunque yo creo que más que por la lengua, es por la afinidad cultural.
Rangitoto es un volcán situado enfrente de Auckland que se formó tras una serie de erupciones hace solo 600-700 años. En la isla formada por el volcán no se puede construir y es una bonita mezcla entre abundante vegetación y roca volcánica. Básicamente lo que hicimos en Rangitoto fue subir a la cima y volver a bajar. Por cierto, Rangitoto (nombre maorí) significa cielo sangriento. Que bonito.

Hacer una fiesta despedida a Alberto

El sábado pasado toco hacer una fiesta de despedida a Alberto. Vino un montón de gente al apartamento. La fiesta comenzó a las 9 de la noche y terminó a las 4:30 de la mañana. Hay gente que llega más tarde y hay gente que se va antes, pero tú, como anfitrión, te la comes (más bien, te la bebes) toda. E hicimos lo típico de una fiesta: Beber en abundancia y hablar, derivando los temas de conversación a planes de dominar el mundo cuando se empieza a estar contento. También estuvimos jugando al okalimotxo en inglé que me regalasteis. Aunque jugamos con cerveza (más tarde yo con whisky). Y tuve que cantar una canción acerca de los pechos de Arah, una koreana. ¡Qué grande eres Boiso! Y como en la versión española, acabas sin poder abrir la boca por las putas reglas. Ah, en la fiesta hasta baile la bilirrubina (lo siento Sandra, te he sido infiel). Asi que estuvo completa. En hora y media comienza la fiesta de despedida para Omar y para mi. Esperemos superar las 72.


P.d: Como habréis podido comprobar, he subido nuevas cosas. Pero están en un nuevo álbum (enlazado aqui a la derecha como Bocabajo2) ya que no me deja más de 500 fotos por álbum. Como siempre, los videucos al final.

martes, 3 de junio de 2008

Culebrón y vuelta a España

Vosotros os preguntareis (o no) porque llevo tanto tiempo sin escribir. Las razones son varias: Primero, que ya no tengo tantas cosas que contar. Tratar con chinorris se convierte en el día a día y ya deja se ser una novedad graciosa describir las curiosidades y costumbres del país. Segundo, que estoy bastante vago para ponerme a ello. No sé porqué, pero casi ni llamo a casa ni escribo en el blog. Y los que me escriben correos verán que tardo tiempo en responder. Estoy perezoso para esto. Y último, porque por aquí las cosas han estado revueltas. Y tampoco tenía ganas de escribir cosas poco agradables y no tenía tantos ánimos para ponerme a ello. El resumen es que al final vuelvo a España el 10 de Julio Dios mediante. Empecemos con la historia que tiene muchas intrahistorias. He estado esperando para no escribir nada en caliente, pero seguro que mi sesgo personal estará presente. El resumen es este:

- El plan previsto era estar hasta mediados de Julio en Auckland, dejar el apartamento y viajar en caravana Alberto, Omar, Pan y yo recorriendo la Isla Sur. Y volver a Auckland para coger el avión el 4 de Agosto. Esto lo planeamos así, porque Pan terminaba su estancia en LSI el 11 de Julio.

- Pan se echo un novio tahitiano. Al par de semanas de estar con ella, parecía que el colega quería vivir de gratis en nuestro apartamento. Y además sin preguntar ninguno de los dos si se podía quedar. Como se supone que son diferentes culturas y blablabla pues le puedes achacar todo a ello. Pero vamos, que si en Gales comprobé que los franceses eran los mayores gorrones del universo (lo siento, Mouton) Pues en Nueva Zelanda lo hago extensivo a los de habla francesa. El caso es que no querer ser una ONG provocó ligeras tensiones internas. Pero fueron solucionadas acordando ciertas reglas y todo volvió más o menos a su cauce. No era todo como antes, pero bien. Digo que no era como antes ya que Pan parecía otra persona diferente a la que conocíamos. Pero tranquilos, no voy a agarrarme al “antes molabas”

- Alberto dijo que él se volvía el 9 de Julio por motivos personales. Y que viajaría a la Isla Sur el 12 de Junio.

- Omar tenía pensado ir a Australia el 1 de Junio y volver el 13. Alberto y yo no le acompañamos por dinero, básicamente. Yo preferí pagar un mes más de curso, se nota que soy aplicado.

- Pan decide ir 10 días a Tahiti con el novio y un amigo del novio. Saca el billete pero luego se da cuenta que no la van a dejar volver a entrar a NZ si sale del país (tiene una visa rara y ya sabemos que aquí son muy puteros) Pierde el dinero del billete y nos dice que no nos va a poder acompañar a la Isla Sur. Los motivos son: Sus padres le iban a pagar el viaje a Tahiti pero a cambio la iban a dejar de dar dinero para estar en NZ. Y por lo tanto no tenía para ir para la Sur. El caso es que al final no va a ninguno de los dos sitios. Nunca lo acabé de entender muy bien, pero el motivo oficial es “que no tiene dinero”

- Como se nos iba a quedar una vacante al irse Alberto, pensamos en buscar compañero de piso entre el 1 de Junio (cuando se iba Omar a Australia, enlazándolo con cuando se iba Alberto a la Isla Sur) y el 15 de Julio. Con posibilidad de que se quedará más tiempo con Pan (va a seguir viviendo en NZ) o con el novio o con un amigo del novio también o ya se vería. Como no sabíamos todavía hasta que fecha íbamos a ampliar el contrato, estábamos esperando a que estuviera cerca de terminara el plazo (vencía el 30 de Mayo)

- El caso es que tres días antes de que se cumpla la fecha para extender el contrato (habíamos estado esperando hasta el final para saber cuanto lo íbamos a extender, dependiendo de si entraba alguien en el piso o Pan se quedaba en el apartamento, ya que va a seguir viviendo en NZ o qué) nos comunica que ella quiere dejar el apartamento el día 19 de Junio que es cuando vuelve su novio de Tahiti (recordad el viaje fallido) y que es cuando expira el contrato. Yo entendí como que se iba y punto. Luego al parecer lo que quería era buscar una solución buena para todos. Pero la verdad es que era imposible y además yo no quiero retener a nadie contra su voluntad, por mucha palabra de estar hasta una fecha hubiera dicho antes.

Asi que, viendo las circunstancias, a Omar y a mi nos quedaba:

- Extender en esos momentos el contrato a ciegas con la esperanza de encontrar dos compañeros de piso para el periodo entre el 19 de Junio y el 15 de Julio. A ver donde encuentras a dos personas para ese periodo absurdo y además diciendo que tienen que esperar hasta el 19 para entrar a vivir. Nos dimos cuenta que esa opción no era muy viable.

- Alquilar otro apartamento para dos durante ese tiempo. Tampoco es viable, porque aquí tienen un mínimo de por lo menos tres meses para alquilar.

- Irnos los dos a vivir a un albergue. Sale más caro y muchísimo más incomodo que un apartamento. Y la verdad, tras ver como todos los planes se iban abajo, no le vemos mucho sentido a continuar en Auckland viviendo junto a vagabundos reconvertidos en un albergue (había unos cuantos de ese perfil en donde estuvimos el primer mes). Sería algo así como continuar por continuar.

Asi que tras ver que podíamos cambiar el billete de avión por solo 25€ de coste, decidimos que lo mejor era nada más terminar el contrato del apartamento, ir para la Isla Sur, donde nos juntamos con Alberto y más gente. Y tras nuestra estancia en la Isla Sur, volver al Reino de España. Tras ver como estaban las cosas, era la mejor opción.

Para vuestra suerte o vuestra desgracia, el 10 de Julio me tenéis por España. Y amenazo: Vuelvo dispuesto a seguir molestando.