viernes, 25 de abril de 2008

Un día en el rugby

Aunque ya ha pasado cierto tiempo desde que asistí con los chavales a un partido de rugby, no podía dejar de comentar dicho evento. Ir a un partido de rugby es un nuevo paso para comprender las costumbres oriundas. Y es que el rugby es, claramente, el deporte nacional. La selección de Nueva Zelanda presume de ser la mejor del mundo, ya que la mezcla de blanquitos británicos con la fuerza y velocidad de los maoríes, les sale perfecta. La selección nacional es llamada "All Blacks", que nada tiene que ver con el grupo "All The Black" ni con que sean negros. Esta selección es posible que la hayáis visto por la tele realizando su archiconocida "Haka" (una danza de guerra maorí que realizan antes del partido) o habréis oído hablar de un portento de este deporte, ya retirado, como el neozelandés Jonah Lomu

Dado que los "All Blacks" no juegan en Auckland hasta dentro de un tiempo, nos tuvimos que conformar con ir a ver al equipo de la ciudad: Los Blues de Auckland. El partido era correspondiente a la Super 14, una liga donde están los mejores equipos de Australia, Nueva Zelanda y Sudáfrica. Vamos, que tienen nivel. Los Blues perdieron el partido contra los Brumbies de Brisbane por 11-16. Pero es que a nuestro equipo le faltaba su mejor jugador, Rokocoko. Pero no es excusa para esos tuercebotas. Al final del partido no pude reprimirme en sacar el pañuelo de los mocos y gritar el "¡Fuera Van Gaal! ¡Nuñez dimisión!" con todas mis fuerzas. Y es que con lo que les pagan, es una vergüenza lo poco que se esfuerzan. En la mina los querría ver yo.

El espectáculo lo tienen bastante bien montado. Primero hay un concierto dentro del estadio, después pasa la mascota del equipo montado en un barco pirata que echa fuego, más tarde aparece un helicóptero del temible ejercito neozelandés para aterrizar en el campo con el balón del partido (no tienen otra cosa que hacer) Y todo esto, aderezado con un montón de rubiacas en paños menores agitando sus pompones. Todo eso está muy bien, pero lo mejor de todo es que no se la cogen con pinzas como en España y te dejan beber dentro del campo. Eso si, las botellas de cerveza son de plástico para que no se las tires al árbitro a la cabeza. ¿El partido? Bien. Aunque parezca mentira, durante mi estancia aquí he intentado aprender las reglas y costumbres del rugby. Es un deporte que es muy bonito de ver y además hay violencia controlada. Dicen que el fútbol es un juego de caballeros jugado por villanos y el rugby es un juego de villanos jugado por caballeros. Y es verdad, porque aquí ni se fingen lesiones, ni se tiran a la piscina, ni se tira el balón fuera porque uno se ha hecho pupa y ni siquiera se protesta al árbitro. Quiero repetir.

P.d: Hay nuevas fotucas publicadas en Bocabajo. A partir de la foto 369, llamada "Afganas"

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Violencia y cerveza.... ya se por qué te gusta tanto, es como un botellon de los nuestros!

Anónimo dijo...

Como entiendes de Rugby, no??? Ya veo que sigues disfrutando de tu estancia alli. que guay!!! Besos.

Luisen dijo...

¿Un botellón con cerveza? A eso se le llama refrigerio. ¡Los botellones son con whijky!

Elena, cuando vuelva, te explico las reglas, que te veo interesada :-P